Por: La Redacción.
Ciudad Juárez, Chih., 5 de abril del 2023.- “Yo me salvé porque me tapé la cara con mi suéter y me metí al baño a mojarme”, narró ayer el venezolano Eduardo de Jesús Caraballo López, de 26 años de edad, el primer migrante lesionado en el incendio ocurrido en el Instituto Nacional de Migración (INM) de Ciudad Juárez y que ha logrado el apoyo humanitario en Estados Unidos, a través de la Oficina de Manejo de Emergencias de El Paso.
Sin poder hablar mucho debido a las secuelas que dejó en sus pulmones la intoxicación que sufrió la noche del pasado lunes 27 de marzo dentro de la Estancia Provisional del INM, el suda-mericano narró vía telefónica a El Diario que él vendía flores en Ciudad Juárez, en donde contaba con un proceso vigente de refugio en México ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), lo cual logró con apoyo de la organización internacional Hebrew Inmigrant Aid Society (HIAS) en esta frontera.
“Yo salí a comprar medicamentos para mi niña, que le dan demasiadas convulsiones, y de eso tengo que estar pendiente, y me detuvieron por la “equis”… me tuvieron encerrado en Migración en la celda, no se veía nada y metí la cara en la poceta, donde uno hace pipí, ahí”, relató quien cruzó la frontera después de declarar ante las autoridades mexicanas.
Llegó a Juárez el 28 de diciembre
“Eduard” salió de Venezuela con su esposa, Viangly Infante, y sus tres hijos de 1, 12 y 13 años de edad el 6 de octubre de 2022, seis días antes de que el Gobierno de Estados Unidos extendiera la política sanitaria de expulsión llamada Título 42 para los migrantes venezolanos, y cuando todavía les daba libertad condicional para que pidieran iniciar un proceso de solicitud de asilo político dentro de su país.
El 1 de noviembre llegaron a Tapachula, Chiapas, y a Ciudad Juárez desde el 28 de diciembre, en donde rentaban un cuarto de hotel mientras lograban una cita a través de la aplicación móvil CBP One para cruzar la frontera en busca de una excepción humanitaria al Título 42.
“Hace poco él llegó a la oficina de HIAS y nos dijo que estaba muy contento porque el 14 de febrero había vendido muchas flores en la calle”, relató la organización que lo apoyaba en esta frontera a través de un comunicado de prensa, en el que el pasado 31 de marzo informó que interpondrá una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) por su detención, pese a que él contaba con una “constancia de trámite respecto de la solicitud del reconocimiento de la condición de refugiado” emitida por la Comar, valida en el estado de Chihuahua.
Viangly, quien lleva el nombre de su esposo “Eduard” tatuado en el antebrazo derecho, narró que cuando él fue víctima del operativo que realizó el INM tras la solicitud del Municipio de Juárez, ella permaneció toda la tarde con sus tres hijos en el exterior del edificio federal, hasta que se dio cuenta de que en el interior había ocurrido un incendio y luego lo vio salir en una camilla.
Al principio el venezolano fue trasladado al Hospital de la Familia (Femap), luego al Hospital General de Zona (HGZ) número 35 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la mañana del sábado 1 de abril fue trasladado a bordo de una ambulancia a un hospital de El Paso, con el apoyo de la organización estadounidense Las Américas.
Listo para la libertad
condicional humanitaria
Tras el incendio que hasta ayer sumaban 39 migrantes fallecidos, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) informó que la Oficina de Manejo de Emergencias de El Paso está preparada para usar libertad condicional humanitaria en las personas migrantes que están gravemente heridas en Ciudad Juárez, y que puedan ser atendidas en la vecina ciudad.
“CBP ha estado en comunicación con la Oficina de Manejo de Emergencias de El Paso y está preparado para usar la libertad condicional humanitaria caso por caso para permitir que las personas gravemente heridas reciban atención crítica en instalaciones médicas en los Estados Unidos”, informó.
Dijo que CBP utilizará la libertad condicional humanitaria en los Estados Unidos para los servicios médicos de emergencia siguiendo los protocolos establecidos para procesar y admitir rápidamente a las personas lesionadas.
El mismo sábado, Viangly y sus tres hijos cruzaron también la frontera, en donde permanecen en un hotel cercano al hospital en donde es atendido ‘Eduard’, y en donde ya ha podido ponerse de pie, aunque no por mucho tiempo.
“Ya le quitaron la sonda, ya aguanta la respiración sin oxígeno, todavía tiene oxígeno pero se lo quitan de a ratos, pero se lo vuelven a poner y le pusieron otra cosa para respirar. Y él se para pero le dan ganas de toser”, narró la madre, quien aseguró sentirse más tranquila en Estados Unidos.
“Estamos juntos y ya es una tranquilidad… yo pregunté en CBP y me dijeron que normal, nosotros seguimos con nuestro trámite normal de CBP One, pero ya hay unas cosas que tenemos que ir a averiguar con los abogados ya cuando él ya salga de acá (del hospital)”, explicó ayer sin saber aún cuándo será dado de alta.
Desde el otro lado de la frontera, ‘Eduard’ les pidió a las miles de personas en movilidad que siguen en Ciudad Juárez que continúen luchando por sus sueños, pero que acudan a regularizarse como él lo hizo con la ayuda de HIAS, aunque las autoridades federales no respetaron su procedimiento.
“A los migrantes que están en Juárez les digo esto: que lo sigan intentando, que saquen sus papeles legales en Juárez en lo que logran una cita (de excepción humanitaria al Título 42, a través de la aplicación móvil CBP One). Y a Migración: que no los traten mal a los migrantes, les pido”, dijo el venezolano.
Con información de Hérika Martínez Prado/ El Diario de Juárez.